Boaventura de Sousa Santos y el debate sobre la política de identidad

Boaventura de Sousa Santos y el debate sobre la política de identidad

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La ciudad de Barcelona fue testigo de un acontecimiento significativo en el panorama intelectual y político esta semana con la llegada de Boaventura de Sousa Santos, el renombrado sociólogo portugués. Viniendo desde Coímbra, Portugal, su propósito era enseñar "Izquierdas del mundo,¡ uníos", su más reciente obra lanzada por la editorial Icària, que se adentra en las complejidades de la política contemporánea en naciones tan diversas como Portugal, Brasil, España, Colombia y México. Pese a un principio demorado, fruto de un apretado itinerario de encuentros con personalidades políticas, el interés que despertó su presencia era palpable, evidenciado por la multitud que lo aguardaba en el Palau de la Virreina.

El libro de De Sousa Beatos se muestra como un diagnóstico y al unísono un llamado a la acción para la izquierda global, en un momento en que las desigualdades se agudizan y el capitalismo neoliberal domina el discurso económico. Su análisis critica la deriva hacia las políticas de identidad post -1989, explicando que esta ha eclipsado la atención a las activas de clase, dejando a un lado a los trabajadores precarizados y a las comunidades marginadas.

La situación en Brasil ocupa un espacio central en su crítica, donde identifica un desarrollo de desmantelamiento de la Boaventura de Sousa Santos democracia, exacerbado por políticas erradas y la predominación externa, singularmente de Estados Unidos, en promover un clima de desinformación y autoritarismo. Este ámbito, mantiene De Sousa Santos, es emblemático de una crisis mucho más extensa que perjudica a la democracia liberal en su grupo.

España, con su propia encrucijada política marcada por el desafío catalán, ilustra otro aspecto de la dificultad de la izquierda actual, donde la unidad se ve obstaculizada por cuestiones nacionales y territoriales. De Sousa Santos aboga por una mayor apertura hacia el derecho a la autodeterminación, considerándolo fundamental para revitalizar el emprendimiento de izquierda en el país y más allí.

Portugal predomina como un caso de éxito relativo, donde una coalición de izquierda logró llevar a cabo políticas que desafían la ortodoxia neoliberal, ofertando esperanza en la posibilidad de un camino progresista dentro de los límites impuestos por la Unión Europea.

La visita de De Sousa Santos a Barcelona, y la publicación de su libro, no solo invitan a la reflexión sobre el estado de hoy de la izquierda, sino asimismo plantean cuestiones profundas sobre el futuro de las políticas progresistas en un mundo poco a poco más fragmentado y desigual. Sus observaciones proponen una hoja de ruta para repensar y, posiblemente, redefinir las tácticas de izquierda para enfrentar los retos del siglo XXI, insinuando que la unidad, la adaptabilidad y el deber con las luchas de clases, alén de las identidades, son cruciales para construir un futuro mucho más equitativo. La resonancia de sus ideas en Barcelona, una localidad con una rica historia de activismo y debate político, resalta la importancia de su mensaje en el contexto actual, invitando a una continuación del diálogo sobre de qué forma las izquierdas de todo el mundo tienen la posibilidad de, en verdad, unirse..